De acuerdo con la Ley del Impuesto sobre la Renta de No Residentes (IRNR), los propietarios de propiedades en España que estén arrendadas deben declarar el importe bruto del alquiler percibido y pagar impuestos sobre el mismo a un tipo fijo del 24%.
Sin embargo, los contribuyentes residentes en la UE, Islandia y Noruega pueden deducirse algunos costes de acuerdo con las normas del IRPF para residentes, siempre y cuando esos gastos estén relacionados con la obtención de los ingresos. Además, el tipo aplicable a esa renta neta es solo del 19%.
Los contribuyentes residentes en el Reino Unido perderán el beneficio de pagar impuestos sobre la renta neta a un tipo impositivo menor, una de las diversas medidas aprobadas para terminar con la discriminación entre residentes de España y la UE.
14/07/2016