12 Feb 2019
Desde 2012 los residentes en España deben informar a las autoridades fiscales de los bienes y derechos que ostenten en el extranjero que excedan de 50.000 euros, usando el modelo 720.
La presentación de información incompleta, falsa o fuera de plazo lleva automáticamente a la consideración de los bienes declarados como ganancia no justificada salvo que el contribuyente pueda probar que era titular de esos bienes antes de venir a España, o que los ha adquirido con fondos por los que ha pagado impuestos en España. Las consecuencias son las mismas que si las autoridades fiscales hubieran descubierto bienes ocultos: la presunta ganancia injustificada tributa al tipo marginal del IRPF (45% como mínimo), conlleva una sanción de 5.000 euros por dato y además una sanción del 150% del impuesto sobre la ganancia injustificada.
La Comisión Europea abrió un procedimiento de infracción contra España que terminó con una carta motivada indicando que la normativa infringe la libertad de movimiento de personas y capital y es discriminatoria y desproporcionada.
El pasado 28 de noviembre, el Tribunal Superior de Castilla y León anuló la desproporcionada sanción impuesta a un contribuyente y condenó a la agencia tributaria a pagar las costas.
El director general de la Agencia Tributaria, Jesús Gascón, anunció el pasado 23 de enero que los contribuyentes que presentaran el modelo 720 voluntariamente fuera de plazo no tendrían consecuencias sancionadoras a no ser que la presentación se derive de una actuación de investigación llevada a cabo por la Agencia.
El Sr Gascón también anunció que la Agencia Tributaria enviará mensajes de alerta a los contribuyentes que no hayan informado de cuentas en el extranjero de las que tengan constancia para favorecer la regularización voluntaria antes de que la Administración lo requiera formalmente. Este es el resultado del intercambio de información masivo llevado a cabo por los gobiernos debido al «Common Reporting Standard» introducido en 2016. Una alerta similar se enviará a aquellos que alquilan sus propiedades a través de plataformas gracias a la información facilitada por proveedores como AirBnb, OwnersDirect y otros.
Ahora, más que nunca, es el momento para la regularización voluntaria de bienes que no hayan sido declarados.